ROBERTO DENIZ
| EL UNIVERSAL
lunes 19 de mayo de 2014 12:00 AM
La intervención del Gobierno
nacional en el sector automotor alteró el negocio. Las ensambladoras
privadas están asfixiadas por la falta de divisas, las importadoras
tradicionales sin licencias para traer vehículos y las operaciones de
las empresas y los planes estatales están signados por los malos
resultados.
Las cifras del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) exhiben la transformación del negocio automotor en los últimos años. En 2013 el país importó poco más de 735 millones de dólares en automóviles, tractores, sus partes y accesorios, agrupados en el capítulo arancelario número 87.
Aunque la cifra supone una caída de 63,17% con respecto a 2012, el análisis de los datos confirma a China como el principal proveedor de vehículos que tiene Venezuela.
El año pasado el gigante asiático le vendió al país 269 millones de dólares en productos automotores, lo que representó un 36,5% de las compras totales que realizó Venezuela.
En 2012 a China se le compraron poco más de 769 millones de dólares, lo que en ese momento representó casi el 40% de las importaciones de vehículos y productos automotores que realizó Venezuela.
El salto en las negociaciones con China se observa a partir de 2007, año a partir del cual el Ejecutivo nacional aumentó su intervención en la dinámica del negocio automotor.
Fuentes ligadas a la industria automotriz aseguran que buena parte de los vehículos y partes que vienen de China son importados por el Estado o por las empresas mixtas creadas en los últimos años.
Marcas como Chery, Dongfeng, Haima o Yutong son algunas de las que han entrado al mercado venezolano en los últimos años de la mano del Estado o alguna de las compañías en las que tiene participación.
El auge de China como proveedor de vehículos para el mercado venezolano coincide con el desplazamiento de los socios tradicionales. Hasta 2006 y 2007 países como Estados Unidos, Japón, Brasil, Corea del Sur o Colombia destacaban como los principales vendedores para el mercado local con cifras que oscilaban ente 400 millones de dólares y 1 millardo de dólares, en el caso de Estados Unidos.
Sin embargo, en 2013 por detrás de China se ubicó Estados Unidos al negociar 210 millones de dólares con Venezuela. El tercer lugar fue para Brasil con apenas 45 millones de dólares, mientras que en el cuarto estuvo Panamá al transar 26 millones de dólares.
Las previsiones para este año van en una vía similar. Las ensambladoras privadas apenas han recibido asignaciones de divisas a través del Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad I) para la importación de material de ensamblaje.
Pero las cantidades asignadas están por debajo de los requerimientos de las automotrices en un contexto en que varias se han paralizado tras agotar sus inventarios.
Las cifras del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) exhiben la transformación del negocio automotor en los últimos años. En 2013 el país importó poco más de 735 millones de dólares en automóviles, tractores, sus partes y accesorios, agrupados en el capítulo arancelario número 87.
Aunque la cifra supone una caída de 63,17% con respecto a 2012, el análisis de los datos confirma a China como el principal proveedor de vehículos que tiene Venezuela.
El año pasado el gigante asiático le vendió al país 269 millones de dólares en productos automotores, lo que representó un 36,5% de las compras totales que realizó Venezuela.
En 2012 a China se le compraron poco más de 769 millones de dólares, lo que en ese momento representó casi el 40% de las importaciones de vehículos y productos automotores que realizó Venezuela.
El salto en las negociaciones con China se observa a partir de 2007, año a partir del cual el Ejecutivo nacional aumentó su intervención en la dinámica del negocio automotor.
Fuentes ligadas a la industria automotriz aseguran que buena parte de los vehículos y partes que vienen de China son importados por el Estado o por las empresas mixtas creadas en los últimos años.
Marcas como Chery, Dongfeng, Haima o Yutong son algunas de las que han entrado al mercado venezolano en los últimos años de la mano del Estado o alguna de las compañías en las que tiene participación.
El auge de China como proveedor de vehículos para el mercado venezolano coincide con el desplazamiento de los socios tradicionales. Hasta 2006 y 2007 países como Estados Unidos, Japón, Brasil, Corea del Sur o Colombia destacaban como los principales vendedores para el mercado local con cifras que oscilaban ente 400 millones de dólares y 1 millardo de dólares, en el caso de Estados Unidos.
Sin embargo, en 2013 por detrás de China se ubicó Estados Unidos al negociar 210 millones de dólares con Venezuela. El tercer lugar fue para Brasil con apenas 45 millones de dólares, mientras que en el cuarto estuvo Panamá al transar 26 millones de dólares.
Las previsiones para este año van en una vía similar. Las ensambladoras privadas apenas han recibido asignaciones de divisas a través del Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad I) para la importación de material de ensamblaje.
Pero las cantidades asignadas están por debajo de los requerimientos de las automotrices en un contexto en que varias se han paralizado tras agotar sus inventarios.
Fuente:
http://www.eluniversal.com/economia/140519/china-se-afianza-como-primer-proveedor-de-autos-del-pais
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